¿Por qué nos seducen las personalidades oscuras y a qué nos exponemos?
Hoy quiero hablar sobre relaciones disfuncionales, y sobre cómo podemos ahorrarnos tiempo, recursos y sufrimiento sólo siendo un poco más selectivos y considerando ciertas señales que las personas nos ofrecen.
Empezaré hablando sobre la Triada Oscura, término psicológico que se refiere a los rasgos de maquiavelismo, el narcisismo y la psicopatía. Y lee uno en muchos blogs que las mujeres prefieren los hombres con la triada oscura, y entonces muchos aprendices de la seducción que han sido rechazados por ser demasiado buenos dicen “Ay yo quiero tener la triada oscura porque los hombres con la triada oscura seducen más”.
Y entonces juegan a ser tipos malos cuando tienen el corazón más bueno que el de un cachorrito.
Y fruncen el ceño, y tratan mal a los meseros y se vuelven reactivos, y se las dan de malos cuando en realidad los rasgos de Triada Oscura son mucho más siniestros, y en realidad alguien en su sano juicio no desearía tenerlos de una manera tan pronunciada.
Hay algo que es real: las personas que poseen la Triada Oscura son muy atractivas, pero también ese atractivo rápidamente se diluye y se convierte en una relación tóxica. Tanto hombres como mujeres podemos ser víctimas de una persona con la Triada Oscura, y lo que se cuenta en todos los artículos no es lo que corresponde a la realidad.
Las relaciones humanas tienen un lado oscuro y las relaciones interpersonales contienen una naturaleza paradójica en el sentido de que, además de ser fuentes de enorme felicidad y bienestar, también pueden ser fuentes de todo lo contrario: dolor, soledad, miedo y malestar en general. La Triada Oscura describe tres tipos de personalidades psicológica y emocionalmente tóxicas. En otras palabras, las personas que poseen rasgos de la Triada Oscura son personas que causan daño y que generan consecuencias negativas en sus víctimas, puesto que sólo se relacionan en términos violentos tanto físicos como psicológicos.
La psicología nos enseña que las personas con rasgos de la Triada Oscura no son capaces de sentir empatía hacia los demás ni de demostrar genuino amor. Así de sencillo, si tienes la desgracia de enamorarte de una persona narcisista, maquiavélica y psicopática ésta persona te hará sufrir y nunca te amará, así te haga sentir que te ama, todo hace parte de una compleja máscara o apariencia para sacarte algo, para utilizarte, para extraer de ti algún tipo de beneficio a costa tuya.
A este punto es importante dejar algo en claro: Una persona narcisista y/o maquiavélica y/o psicopática (o con los tres rasgos) sólo se fijará en ti si ve en ti algún tipo de beneficio, si ve que le puedes ofrecer algo (dinero, poder, estatus, apariencia de tener una relación normal, regalos, belleza), lastimosamente ésta persona no te ofrecerá nada sino solo una relación basada en su adoración a sí mismo.
Las personalidades maquiavélicas, narcisistas y psicopáticas comparten una tendencia a ser insensibles, egoístas, maliciosos, manipuladores y crueles en sus relaciones interpersonales. Los maquiavélicos se caracterizan por el cinismo, la astucia y la manipulación de los demás sólo para un beneficio personal, hacen lo que sea para asegurarse su éxito personal en conta del beneficio de su pareja o de un grupo, tienen pocas normas y por ejemplo, pueden tener un noviazgo contigo, sólo porque a través de ti accederán a alguien que quizá tenga más poder o más dinero, luego de lo cual te escupirán de su vida sin el más mínimo remordimiento.
Los narcisistas, por su parte, se caracterizan por su egoísmo, por un enorme sentido egocéntrico del modo de pensar que “todo está permitido”, tienen una imagen de sí mismos demasiado elevada, creyéndose superiores en un sentido negativo a los demás: “yo soy mejor que todos ustedes y su misión es alabarme y subyugarse a mí”. Intentan vincularse con personas con poder y consideran que en general las personas son indignas de su atención y de su amistad.
Los psicópatas, en este caso, integrados, es decir, no asesinos seriales, son personas que son incapaces de sentir de forma genuina los sentimientos humanos, poseen una falsa apariencia de encanto superficial y son mentirosos compulsivos, carentes de toda sensación de culpa o de vergüenza. Hay personas que no son psicópatas completos, pero tienen importantes rasgos que los hacen completamente nocivos y tóxicos en una relación. Toman a los demás siempre como objetos útiles o inútiles a sus objetivos personales. Su relaciones se basan en el engaño, la manipulación y el fingimiento de sus sentimientos hacia los demás, por supuesto con rasgos enormes de crueldad e indiferencia hacia el dolor humano y el sufrimiento que puedan causar en otras personas.
¿Dónde recae su atractivo? Sencillo, en que son personas con un profundo conocimiento intelectual de las relaciones sociales (conocimiento no emocional), son tremendamente carismáticas y encantadoras, se rodean de un brillo superficial personal que amplifica su atractivo y su encanto. Y si ven en ti la víctima perfecta (esto es, una persona buena, con valores, ingenua, idealista y con algo que ofrecer, buscarán encandilarte con una seducción rápida, repentina, empalagosa, donde fácilmente te harán sentir la persona más especial del mundo.
Es casi imposible resistirse a su encanto. Más aún si no tenemos un hábito de estudiar a las personas, de observar su profundidad y tener una capacidad crítica frente a “personas tan supuestamente perfectas” y que tan rápidamente pareciera que dan la vida por nosotros, porque, según ellas, se han encontrado en nosotros a su media naranja, al amor de su vida, con quien quieren ser felices para siempre.
Sin embargo, luego de esta etapa de inicial de rápida seducción, la persona con rasgos de Triada Oscura desata sus rasgos negativos, buscando el dominio y manipulación traumática de la víctima, es decir, hacerle su esclavo psicológico y emocional. Un proceso de continuo goteo sobre la piedra hasta romperla en términos de autoestima, seguridad, confianza, incluso hasta el punto de hacerle dudar de su propio juicio o terminar sus relaciones sociales y familiares, aislándole para que giré en torno a su victimario.
¿Cómo reconoces el maltrato psicológico? Por la presencia de uno o más de los siguientes indicadores:
1. Desvalorización: Ponerte en ridículo, descalificarte, decirte que tu opinión o acciones son triviales o sin importancia, oponerse sistemáticamente a lo que piensas o haces, desprecio.
2. Hostilidad: Reproches, insultos, amenazas de abandono o incluso amenazas de que se hará daño o se suicidará si no haces lo que desea.
3. Indiferencia: Te abandona cuando hay algo importante para ti, menosprecia lo que para ti tiene valor, ignora y desprecia tus emociones y sentimientos buscando anularte emocionalmente. Monopoliza la atención y los recursos demandando cada vez más y más.
4. Intimidación: Juicios, críticas, posturas y gestos amenazantes y manipuladores, conductas destructivas, por ejemplo embriagarse o drogarse hasta dañarte, dañarse o dañar objetos o posesiones.
5. Imposición de conductas: Te bloquea socialmente de tal manera que te absorbe sólo para sí, evitando que otras personas te adviertan o avisen, te da órdenes, invade la privacidad, celos obsesivos disfrazados de amor que lo único que buscan es control total, sabotea tu mente para que no tengas éxito, te critiques o pienses que no eres capaz.
6. Bondad aparente: Se hace la víctima, voltea las cosas y siempre le quedas a deber, mostrándose socialmente como un encanto mientras que en la privacidad es un monstruo.
Es increíble cómo esto no es sólo un tema donde las mujeres son las víctimas, también en el mundo masculino existen hombres presos de relaciones disfuncionales, a la fecha este sólo año he trabajado con tres hombres en proceso de duelo y desprendimiento de relaciones disfuncionales. Lo que pasa es que para nosotros los hombres es un tema más difícil de aceptar, puesto que culturamente nos vemos como los dominantes, pero aceptar que esa bella mujer que anda con nosotros nos está haciendo sufrir y nos está anulando no es un tema tan fácil de reconocer socialmente.
Lastimosamente nuestra cultura actual de exposición y competencia amplifica las manifestaciones de la Triada Oscura, el mundo basado en selfies y en mostrar la belleza, el éxito, el poder y la extrema competencia, genera daños en la psicología de las personas de tal manera que piensan en exhibirse, en manipular, en hacer daño, en conseguir el éxito y el poder al costo que sea y en utilizar a las personas.
Hace unos meses llegó a mi consulta una mujer buscando aprender tácticas de seducción y aprender técnicas de persuasión, tras un par de sesiones empecé a descubrir a una mujer tremendamente manipuladora y narcisista, hice algunas observaciones para profundizar un poco más mis impresiones, y descubrí que un patrón de egoísmo y manipulación en sus relaciones, descubrí que estaba buscando mi ayuda para refinar sus métodos manipulativos a costa de competidores de su empresa y de relaciones personales. Allí mismo dejé de trabajar con ella.
Ojo a esto: la ausencia de remordimiento, la manipulación, la ausencia de empatía genuina y la insensibilidad son contraproducentes para el enriquecimiento, el bienestar y el éxito de las relaciones personales.
Lo más dañino es que las personas con estos rasgos de Triada Oscura pueden fingir pasión, compromiso, intimidad y amor sólo para manipularte mejor y para obtener un beneficio egoísta, tras lo cual pueden analizar tus debilidades estando más cerca de ti para luego tener control y poder absoluto sobre ti.
Mi trabajo como experto y coach es poder ayudar a tu criterio de selección de pareja, de tal manera que vayas avisado que no todo el mundo es bueno, y sobre todo que es preciso desconfiar de aquellas personas que con minutos u horas te dicen que te aman y que eres todo para ellas (esa probablemente sea una de las señalas más claras). También, por supuesto, mi misión es ayudar a quienes han pasado por estas experiencias a salir de las mismas, para lo cual lo más recomendado ya no es el coaching sino la terapia enfocada en resultados tales como la resiliencia, la aceptación y el manejo del dolor y las cicatrices emocionales que estas relaciones dejan, así como el desarrollo de herramientas que permitan confiar a futuro y construir mejores relaciones sociales.
¿Por qué muchas personas aunque saben que sus parejas son nocivas, destructivas y tóxicas siguen a su lado? De esa respuesta me encargaré en el próximo post.
¡Es el momento de vivir una vida extraordinaria!
¡Hasta la próxima!
